El análisis revela un sector en plena transformación, que, si bien muestra una notable recuperación en sus cifras globales de negocio tras la pandemia, se enfrenta a importantes retos estructurales que definen una realidad de dos velocidades.

Principales Conclusiones del Informe:

• El comercio en Canarias vive una paradoja: mientras la facturación del sector minorista ha crecido un 20% en términos constantes entre 2021 y 2024, superando los niveles previos a la crisis de 2008, el tejido empresarial no ha dejado de contraerse. Desde 2008, el archipiélago ha perdido más de 10.000 empresas comerciales, una tendencia que se ha agudizado desde 2020.
• Esta brecha se explica por una recuperación desigual: las grandes empresas han visto crecer su negocio un 25,6% por encima de los niveles de 2019, mientras que las pequeñas empresas apenas han crecido un 2,7% en el mismo periodo. Este debilitamiento de las pymes y autónomos se refleja también en la caída del 6% en el número de autónomos afiliados desde 2019, a pesar de que el empleo asalariado se ha recuperado.
• A futuro, el sector se enfrenta a dos retos cruciales: la falta de relevo generacional, con un 60% de los empresarios mayores de 50 años, y la necesidad de una transformación digital que integre a las pequeñas empresas, aprovechando el auge del comercio electrónico que ya supone el 6,53% del PIB regional.

El informe profundiza en estos y otros indicadores clave, como la evolución de precios, los costes operativos, la confianza del consumidor y los nuevos hábitos de consumo, ofreciendo una herramienta imprescindible para que empresas, administraciones y agentes del sector puedan tomar decisiones estratégicas informadas.

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